El
novato.
Manto de piel de caña.
Pecho de azúcar morena.
Camina la hembra.
Es dueña del sendero.
En el habitáculo de estudiante,
sude con sus sueños.
Movía sus brazos,
como molino castellano.
Soplaba por su boca,
el aguardiente carretero.
Te mira y te arrincona.
Siente su aliento envolvente,
el calor de su cuerpo, de los cuerpos.
Imberbe novato.
Su lengua te registra.
Sus manos te devoran.
Sus dedos hurgan en tus rincones invisibles.
Eres carne tierna.
Te tiemblan las piernas,
y tu espalda es una plancha.
Paso a pasito, dulcemente,
a mimos te va degustando.
No puedes escapar de sus anillos,
Que te envuelve, te envuelve envuelve.
Que te adormece, te adormece, adormece:
De placer.
De amor.
De lo prohibido.
Y lo juro… que así fué.
No estuve soñando.
- El próximo por favor -
Uribazo.
2003 / junio 07.
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