¡Que suerte me ha cagado un pájaro!

Homenaje al GORDO.

La suerte:
No es de aquel, no es de nadie.
Tampoco del que espera, desespera.
La suerte, no florece en el malecón.
Tu suerte blanca, negra, mulata,
La suerte, es incolora, insípida.
La suerta camina sin olor.
¿Qué, esperando su absolución?

Sea por cualquier ente, por tu suerte,
eres culpable, sin ser juzgado.
De nacer con prosas de la suerte.
De ser animal de pantano, con suerte.
De ser pasto de la perspectiva, con suerte.
De ser fervoroso acusador, con suerte.
De ser un apátrida, con suerte.

Salir de esa monotonía dirigida,
es el premio de la suerte, por un nº.
Del caminar carcelario,
es la suerte de la obediencia.
Del señor que reparte suerte.
No callas, en la espera de tu suerte.
En el silencio oscuro de su suerte.

Sembrados de pensamientos negros,
pintaron tu celda de la suerte.
Que suerte, te dejan pensar y escribir.
Que suerte, te dejaron caminar.
Que suerte, perdiste unos kilos.
Que suerte, reboza de dignidad.
Que suerte, te saludan hoy,
los que no gritaron,
cuando tuviste la suerte
de ser atado a la cola del caballo.

La suerte de ser pájaro,
pez
humo
o rayo,
o luz,
es la suerte que tiene el escribano.
Del que aprendes con maña,
con la tinta que escribe y bebe,
del caimán verde de la suerte.

Los barquitos de papel,
lo calafateo un poeta con suerte,
en el puerto de la esperanza
guiño de guasa, ofrendaba al profeta.
Para ti, para el, con lengua torcida,

gano la lotería.
Que suerte fue su partida.
Que suerte ser recordado.
Que suerte ser poeta amado.
Que suerte sentirte alado.
Mirad por las cuatros esquinas,
lanza el huevo de tu limpieza,
mira que suerte la mía,
de el
de ellos
de aquel
de todos,
de los que no tienen suerte,
del que la perdió.
del que buscándola desapareció.
Tu suerte, la suerte de ser tú,
por encima de toda suerte.

Uribazo.

Diciembre 2004 - 2005
Madrid.