El Ente.
Llegue como un ente,
deslizándome entre tu piel,
y la sabana de tu morada.
Mi intención era raptarte.
Pero al sentir tu olor.
El placer me embriago.
Gocé de todos tus atributos,
con un vicio de ultratumba.
Saciado quise irme.
No encontraba la salida,
perdido entre tus piernas estaba.
Tome una dedición, perdido,
seguir donde estaba.
En el comienzo y el final.
Volví a mis andadas,
revolcándome de placer,
sobre tu cuerpo de braza.
Satisfecho, agotando los sentido.
Quise irme por segunda vez.
Caí en cuenta.
Estaba preso, dentro de ti.
El raptado, el capturado,
Fui yo. El ente.
Infeliz? no, feliz.
Tonto de habilidades, si.
Yo siguo aquí, entre
tu piel y tu .
Uribazo.
Noviembre, 2005.