El sueño de una vida.
En el letargo de la impotencia,
esclava de las historias vivida,
se marchita un girasol, soldos.
Vives en la lejania, con ataduras,
masturbandose de recuerdos no vividos.
Del placer de la cobardia,
al rencor del amor avandonado.
Más que reproches, hay que buscar
preguntas inconclusa,
sin repuesta atendidas.
No se levanta la bandera del amor,
con la pasión de la cobardia.
Con la flajelaciónes de los intereses.
Nadie es vastón de nadie,
Nadie da sonrisa sin peaje.
La felicidad se viste de prisión.
La falsa seguridad humana,
nos destruye lentamente, nos envejece.
Anula nuestros sentimientos,
con las canas del tiempo,
amartilladon nuestros corazones,
revistiendoles de una coraza de hierro.
La tristeza de esta historia, conjurada
es que el tiempo pasa,
la soledad esta en tu lado.
Hechando raices parasitaria,
chupandote la vida,
embolviendo tu cuerpo y sentimientos,
en la bolsa del olvido.
Despertaras de este sueño prisión,
querras recuperar lo no vivido.
El placer de la seguridad, del astio consentido.
Se a entumecidos las agujas de tu reloj.
Y será tarde,
tarde para recuperar,
tarde para amar,
tarde para vivir,
tarde para compartir,
tarde para que te comprenda.
Volveras a esa bolsa de seguridad,
te enserraras en ella,
pero no tendras a nadie para odiar,
solo la soledad que no se ha ido.
Por las tarde, te maquillaras de felicidad.
Iras a ver familiares, al parque, a la playa.
Volveras en la noche a tu bolsa
con el miedo de compartir espacio con
ese vacio historico.
Y en la oscuridad sentada en el sillo,
frente a tu ventanal donde la luna te habla.
Aras una pregunta y tendras una repuesta atendida.
-he tenido una vida muerta-
-ahora estoy marchita en vida-.
Uribazo.
24 de Diciembre del 2008.
Majorca. Coral Gables.